Argentina se paraliza con masiva huelga contra Macri y le cuesta US$ 910 millones al país

El gobierno de Mauricio Macri en Argentina vivió ayer la quinta huelga general de su gestión, con la paralización de actividades en el transporte terrestre, aéreo y marítimo, así como de los servicios de recolección de basura y limpieza de calles, bancos, escuelas y hasta la atención médica en el sector público.

Los principales sindicatos del país agrupados en la Confederación General del Trabajo (CGT) convocaron la acción de fuerza en contra de las medidas de ajuste económico del Ejecutivo, en medio de una crisis que golpea sus aspiraciones de ser reelecto en octubre.

El Ejecutivo, en tanto, calculó el costo de la paralización e indicó que en esta oportunidad el país perdió 40.500 millones de pesos argentinos (US$ 910 millones), lo que supone un alza de 6 mil millones de pesos respecto de la protesta del 29 de abril.

La cifra se traduce, además, en un golpe al 0,22% del Producto Interno Bruto anual del país, aseguró el Ministerio de Hacienda que conduce Nicolás Dujovne.

Según los cálculos, el rubro más afectado fue la industria, con una pérdida de 8.167 millones de pesos (o un 20% del costo total de la jornada), seguido del comercio y del sector inmobiliario. Este último representa más del 12% de la actividad económica de la nación y habría dejado de percibir unos 4.857 millones de pesos.

Las tres áreas juntas suman casi la mitad de las pérdidas totales de la jornada, indicó el informe de Hacienda.

Medida de fuerza

Controlada por el peronismo, actualmente en la oposición, la CGT reclama que el gobierno impulse aumentos de sueldos que equiparen la alta inflación (cercana a 50% en el acumulado a doce meses) y que reduzca algunos impuestos que afectan a los trabajadores.

Las altas tarifas de servicios -con las que el Ejecutivo apunta a reducir el déficit- también fueron criticadas durante la protesta, pues el gremio asegura que son causa del importante aumento de la pobreza (a un 32%).

Así, gran parte de Buenos Aires se vio desolada, aun cuando algunas agrupaciones adheridas a la CGT llevaron a cabo algunas manifestaciones en respaldo de la medida gremial.

Los aeropuertos se vieron inactivos, al igual que los puertos de granos del área de Rosario, una de las regiones agroindustriales más importantes del mundo.

Los efectos del paro también se sintieron en el deporte: la final de la Recopa Sudamericana de fútbol, que originalmente debían disputar el local River Plate contra el equipo brasileño Atlético Paranaense, fue postergada para hoy.

En tanto, medios reportaron que el único sector que hizo contrapeso a la huelga fueron los comercios, que mantuvieron actividad normal en muchas ciudades del interior.